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AGUA PARA TODOS
Día Mundial del Agua: El Gobierno federal avanza en obras y políticas para fortalecer la seguridad hídrica
Para 2025 y 2026, la estrategia incluye ampliar el acceso al agua, consolidar polos productivos sostenibles y fortalecer la resiliencia de las ciudades ante fenómenos extremos, garantizando una mejor calidad de vida para los brasileños. - Foto: Ricardo Stuckert/Secom-PR
Con motivo del Día Mundial del Agua, celebrado el 22 de marzo, Brasil reafirma su compromiso de garantizar la seguridad hídrica de millones de personas, especialmente en las regiones más vulnerables. El semiárido brasileño, una de las regiones más pobladas del mundo, enfrenta largos períodos de sequía y alberga a 28 millones de personas. A pesar de su gran extensión territorial, el nordeste concentra aproximadamente el 3 % de la disponibilidad de agua del país, mientras que partes de la Amazonia también sufren períodos de sequía.
Para hacer frente a este desafío y garantizar que la población esté protegida, el Gobierno federal invierte en programas estructurales como el Programa Cisternas, Agua para Todos, Agua Dulce, obras de saneamiento básico y la transposición del río San Francisco. Desde el inicio de este Gobierno, se ha ampliado la infraestructura hídrica para reducir desigualdades y preparar al país para los impactos del cambio climático.
Para 2025 y 2026, la estrategia incluye ampliar el acceso al agua, consolidar polos productivos sostenibles y fortalecer la resiliencia de las ciudades ante fenómenos meteorológicos extremos, con el fin de garantizar una mejor calidad de vida para los brasileños.
NUEVO PAC — El Nuevo PAC (Programa de Aceleración del Crecimiento), ha permitido que el Gobierno federal retome las inversiones en seguridad hídrica, revitalización de cuencas y abastecimiento urbano y rural, enfocándose en el acceso sostenible al agua de calidad, esencial para el consumo de la población y el desarrollo socioeconómico. En 2024, se entregaron 24 mil cisternas, 119 sistemas de desalinización y 23 sistemas simplificados de acceso al agua en aldeas indígenas.
AGUA PARA TODOS — Incorporado al Nuevo PAC, el eje Agua para Todos tiene como objetivo universalizar el acceso al agua para el consumo humano y la producción agrícola y alimentaria en áreas rurales. Hasta 2026, se invertirán BRL 30,8 mil millones. Del total de recursos previstos, BRL 11,8 mil millones se destinarán al eje secundario de infraestructura hídrica y BRL 4,4 mil millones a la revitalización de cuencas hidrográficas. Además, el programa Agua para Todos cuenta con los ejes secundarios de Abastecimiento de Agua y Agua para Quienes Más Lo Necesitan, lo que amplía el alcance de las acciones para garantizar el acceso al agua en distintos contextos y necesidades.
Siempre decía que la sequía es un fenómeno de la naturaleza, pero la muerte de animales y personas era consecuencia de la irresponsabilidad de quienes gobernaban este país. Porque teníamos la capacidad de actuar, y así lo demostramos”
Luiz Inácio Lula da Silva,
Presidente de la República
MEJORA DE VIDA — En sus pronunciamientos, el presidente de la República, Luiz Inácio Lula da Silva, ha destacado la importancia de las inversiones para mejorar las condiciones de vida de la población. “Quiero decirles que es una alegría venir aquí para hablar de un tema extraordinario: el programa Agua para Todos. El programa pretende garantizar que todos los brasileños puedan tener agua de calidad para beber, bañarse y cocinar. Por eso estamos aquí, para traerles agua, porque nadie puede vivir sin agua, y nadie puede vivir sin comida”, declaró el presidente durante la entrega de la primera etapa del sistema Adutora da Fé, en la ciudad de Bom Jesus da Lapa, estado brasileño de Bahía.
SEGURIDAD HÍDRICA — Esta semana, en otro paso significativo para garantizar el abastecimiento de agua en regiones vulnerables, el presidente Lula participó en la inauguración del Complejo de Oiticica, en el sertão [región desertica] del Seridó, en Rio Grande do Norte. Incluida en el contexto del programa Agua para Todos, la obra beneficiará directamente a unas 294 mil personas en 22 municipios.
"Siempre decía que la sequía es un fenómeno de la naturaleza, pero la muerte de animales y de personas era consecuencia de la irresponsabilidad de quienes gobernaban este país. Porque teníamos condiciones para hacerlo, y así lo demostramos. No solo porque se construyó un gran canal, sino porque este canal hace que el agua fluya por el estado de Paraíba, por el estado de Rio Grande do Norte, una parte del estado de Pernambuco, por el estado de Ceará y por el estado de Bahía", declaró el presidente durante el evento.
La capacidad del reservorio se ampliará de 75,56 millones a 742 millones de metros cúbicos. Desde 2013, el Gobierno federal ha invertido BRL 765 millones en la obra, de los cuales BRL 163,1 millones corresponden al Gobierno actual a través del Nuevo PAC.
- El Complejo de Oiticica, en el sertão del Seridó, en Rio Grande do Norte, beneficiará directamente a 294 mil personas en 22 municipios. Foto: Ricardo Stuckert / PR
Actualmente, miles de personas en Ceará, Paraíba, Pernambuco y Rio Grande do Norte reciben agua de calidad y en cantidad adecuada gracias a la transposición. Es un marco histórico para la seguridad hídrica de la región”
Giuseppe Vieira, secretario nacional de Seguridad Hídrica
SAN FRANCISCO — El Proyecto de Integración del Río San Francisco (PISF) es la mayor obra de infraestructura hídrica del país y forma parte de la Política Nacional de Recursos Hídricos. Más que un marco de la ingeniería nacional, la transposición del “Viejo Chico” representa una solución histórica a la escasez de agua en el semiárido de la región noreste y tiene como objetivo abastecer las demandas hídricas de la población.
El proyecto garantizará la seguridad hídrica de las más de 12 millones de personas que viven en la región noreste en 390 municipios de los estados más vulnerables a las sequías: Ceará, Paraíba, Rio Grande do Norte y Pernambuco.
PRIORIDAD — Para el secretario Nacional de Seguridad Hídrica del Ministerio de Integración y Desarrollo Regional (MIDR), Giuseppe Vieira, garantizar el acceso al agua en el semiárido y en regiones con baja pluviosidad a través del PISF es una prioridad. “Su importancia para el noreste septentrional es inmensa, pues hoy en día miles de personas en Ceará, Paraíba, Pernambuco y Rio Grande do Norte reciben agua de calidad y en cantidad adecuada gracias a la transposición. Es un marco histórico para la seguridad hídrica de la región”, explicó el secretario.
OBRAS ACELERADAS — Las obras hídricas estructurales que forman parte del PISF avanzan a un ritmo acelerado. En Ceará, el primer canal del Ramal del Salgado ha alcanzado un 79 % de ejecución, con finalización prevista para 2027, y beneficiará a 5 millones de personas en el sertão. Por su parte, el Ramal del Apodi, extensión del Eje Norte del PISF, ha superado el 72 % de su construcción y se espera que entre en funcionamiento en 2026, llevando agua a 54 ciudades y 750 mil personas en Ceará, Paraíba y Rio Grande do Norte.
RAMAL DEL AGRESTE - En Pernambuco, el Ramal del Agreste avanza para atender a 2,2 millones de personas en 71 ciudades, garantizando un abastecimiento continuo y fomentando el desarrollo de la región. Con una extensión de 70,8 km y dos embalses, el proyecto también incluye 17 programas medioambientales para mitigar el impacto y fortalecer la sostenibilidad hídrica en el Agreste del estado de Pernambuco.
NUEVOS PROYECTOS — El Gobierno federal también está acelerando obras y contratando nuevos proyectos para ampliar la infraestructura hídrica y garantizar el acceso al agua en regiones vulnerables. Además, el Gobierno federal invierte en la expansión del monitoreo de cambios climáticos. Entre las acciones en curso, destacan la contratación de nuevas obras asociadas a la integración del río San Francisco, la finalización del Lote 2 del Canal Acauã-Araçagi, en Paraíba, y la ejecución de proyectos como el Ramal del Salgado, el Cinturón de las Aguas y la ampliación del Eixão das Águas, en Ceará. En los próximos años, se concluirán obras estratégicas como tramos del Canal del Sertão de Alagoas y del Canal del Sertão de Bahía.
COMBATE A LAS DESIGUALDADES — Para reducir las desigualdades regionales, se están invirtiendo BRL12 mil millones en el abastecimiento de áreas afectadas por la sequía. Las acciones incluyen la construcción de la Represa de Nova Algodões, en Piauí, el Acueducto de Seridó, en Rio Grande do Norte, y la reanudación de las represas Arroio Taquarembó y Jaguari, en Rio Grande do Sul, y Gatos y Panelas II, en Pernambuco. También se está concluyendo el Acueducto de la Fe, en Bahía, la Represa Oiticica, en Rio Grande do Norte, y 133 sistemas de desalinización. Próximamente, comenzarán nuevas obras, como la Represa Rio da Caixa y la segunda etapa del Acueducto de la Fe, en Bahía, la Represa del Río Jucu, en Espírito Santo, y el Acueducto del Agreste Potiguar, en Rio Grande do Norte.
Cuando llegábamos del trabajo, teníamos que ir al puerto a buscar agua para bañarnos. Mis hijos iban a la escuela por la mañana y tenían que bañarse a la orilla del lago. Ahora ya no: se bañan en casa. Hay bastante agua”
Rosilda Cordeiro, beneficiaria de tecnologías de captación de agua en la Amazonia
RECURSOS HÍDRICOS — Con motivo de la celebración del Día Mundial del Agua y de los avances en la gestión de los recursos hídricos, la Agencia Nacional de Aguas y Saneamiento Básico (ANA) realizó una ceremonia el jueves 20 de marzo. La ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, Marina Silva, fue una de las participantes en el evento y subrayó la necesidad de proteger el medio ambiente, especialmente los bosques, que son infraestructuras naturales del agua. “Si degradamos nuestros bosques, no podemos mantener los recursos hídricos. Si no prestamos atención a la infraestructura natural del agua, nos quedaremos sin ella. Cuando pensamos en los bosques, estos son los grandes guardianes del agua. Son infraestructura natural para los recursos hídricos”, afirmó Marina.
COP30 — La ministra también puso de relieve que la cuestión del agua se debatirá ampliamente en la COP30, que se celebrará en Belém, Pará, en noviembre. “Estamos trabajando en la agenda de acción sobre los recursos hídricos. Incluso tenemos un espacio dedicado a este tema en la COP30. Y queremos que en la COP30 se debata también sobre las causas del creciente riesgo de escasez de agua, no solo en Brasil, sino en el mundo, como consecuencia del cambio climático”, explicó la ministra.
PROGRAMA CISTERNAS — Una de las iniciativas más importantes para la seguridad hídrica en el semiárido, el Programa Nacional de Apoyo a la Captación de Agua de Lluvia y otras Tecnologías Sociales (Programa Cisternas) tiene como objetivo promover el acceso al agua mediante la implementación de tecnologías sociales simples y de bajo costo. Creado en 2003, el programa cumple dos décadas y actualmente proporciona agua a 1,3 millones de familias en el semiárido y la Amazonia. Para celebrar esta trayectoria, el Ministerio de Desarrollo y Asistencia Social, Familia y Combate al Hambre (MDS) publicó a finales de 2024 el libro “Agua para Cosechar Futuro: 20 años del Programa Cisternas”, que reúne relatos de gestores públicos, investigadores, líderes de organizaciones sociales y beneficiarios que contribuyeron a la construcción de esta política pública. Además, una serie de videos disponible en YouTube muestra el impacto del programa en la vida de los habitantes de Ceará y de la Amazonia.
Una de las beneficiarias es Rosilda Cordeiro Leite, de 41 años, a quien en agosto de 2024 se le instaló en su domicilio el sistema de captación y reserva de agua de lluvia, una de las tecnologías integradas al Programa Cisternas. Su familia es una de las 1.987 beneficiadas con estos sistemas autónomos en la Amazonia. Ahora, ella y su familia tienen acceso a un fregadero para lavar alimentos; ya no acumulan platos sucios; los niños y niñas ya no sufren problemas intestinales frecuentes y cuentan con ducha para bañarse e inodoro con descarga y fosa séptica, además de agua para regar cultivos de subsistencia, como la mandioca y el plátano. “Nos ayudó mucho. Antes, cuando llegábamos del trabajo, teníamos que ir al puerto a buscar agua para bañarnos. Mis hijos iban a la escuela por la mañana y tenían que bañarse a la orilla del lago. Ahora ya no: se bañan en casa. Hay bastante agua”, celebró Rosilda.
¿CÓMO FUNCIONA? - La tecnología consiste en un módulo familiar que incluye un sistema de captación de agua de lluvia, un dispositivo de tratamiento, un depósito individual de mil litros, un filtro de barro de ocho litros, una instalación sanitaria domiciliaria y cuatro puntos de uso, incluido un inodoro. Además, la tecnología cuenta con un módulo de captación de agua de una fuente complementaria, una unidad de tratamiento, un depósito comunitario de cinco mil litros y una red de distribución de agua a los módulos familiares.
- La madre Mikaele junto a sus hijos Reginaldo y Laura: el Programa Cisternas ha cambiado realidades en Barreira, en el interior de Ceará
REACTIVACIÓN — Después de años de discontinuidad, en 2023 el Gobierno federal reanudó las inversiones en el Programa Cisternas, ampliando el presupuesto y estableciendo la meta de implementar más de 200 mil nuevas cisternas hasta 2026. Reconocido internacionalmente, el programa ha recibido premios y se ha convertido en referencia para otros países, como Argentina y Bolivia.
AUTONOMÍA — Más que garantizar el acceso al agua, el Programa Cisternas ha sido una herramienta de empoderamiento femenino, especialmente en el semiárido. Al eliminar la necesidad de recorrer largas distancias para obtener agua, muchas mujeres han ganado más tiempo para el trabajo, la educación y la participación social.
AGUA DULCE — Otra iniciativa que celebró su 20.º aniversario fue el Programa Agua Dulce (PAD), que atiende principalmente a comunidades rurales del semiárido brasileño. Creado en 2004, el PAD utiliza sistemas de desalinización que convierten el agua salobre de pozos subterráneos en agua potable. Actualmente, el programa beneficia a más de 254 mil personas, con una capacidad de producción de 4,2 millones de litros de agua desalinizada por día. Además de instalar los equipos, el programa capacita a los residentes para operar y mantener los sistemas, garantizando el acceso continuo al agua potable.
NUEVO CAPÍTULO — El acceso al agua ha marcado un nuevo capítulo en la vida de muchas familias, especialmente en la de las mujeres. Para Alana Karla da Silva Medeiros, agricultora y residente del municipio de Desterro, en Paraíba, la llegada del programa representó mucho más que agua potable: trajo dignidad, seguridad y una nueva perspectiva de vida. “Dependíamos del agua acumulada de las lluvias, pero no siempre alcanzaba hasta la siguiente temporada de lluvias. Ahora sabemos que, incluso en tiempos de sequía, tendremos agua de calidad para beber, cocinar y mantener nuestras actividades. Ha sido una de las mejores obras realizadas en nuestra comunidad”, afirmó la agricultora.
SANEAMIENTO BÁSICO — El saneamiento básico es uno de los pilares de la seguridad hídrica y consiste en el acceso al agua potable, que es esencial para la salud pública. En Brasil, alrededor del 17 % de la población aún no tiene acceso al agua potable y aproximadamente el 40 % carece de alcantarillado, según el Sistema Nacional de Información sobre Saneamiento Básico (SINISA). Para hacer frente a este desafío, el Gobierno federal está ampliando las inversiones en el sector a través del Nuevo PAC, que asignará BRL 2 mil millones para el abastecimiento urbano, BRL 4 mil millones para la recolección y tratamiento de aguas residuales y BRL 600 millones para la gestión de residuos sólidos.
IMPACTOS SOCIALES — El ministro de Ciudades, Jader Filho, destacó que la medida supondrá un cambio significativo para miles de brasileños. “El Gobierno del presidente Lula ha trabajado constantemente para que estas cifras no sigan como están, y la prueba de ello es la nueva selección del PAC para el saneamiento básico. Son recursos para estimular inversiones y mejorar la regulación en el sector del saneamiento básico”, afirmó el ministro durante el lanzamiento de la Agenda Legislativa del Saneamiento 2025.
DÍA MUNDIAL DEL AGUA — Creado por la ONU en 1992 en el territorio brasileño, el Día Mundial del Agua surgió como un marco para debatir sobre la preservación y gestión de los recursos hídricos. Cada año se elige un tema para la reflexión global y, en 2025, el tema será “Salvemos Nuestros Glaciares”. En Brasil, la Agencia Nacional de Aguas y Saneamiento Básico propone el debate sobre “Las Aguas Conectan y el Saneamiento Transforma”, dentro de la Jornada de 25 años de la institución. Los programas federales dirigidos a la seguridad hídrica y el saneamiento están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, especialmente con el ODS 6, que pretende garantizar el acceso universal al agua potable, segura y accesible para todos para 2030.