Gobierno federal registra disminución acentuada de la desforestación en el Territorio Indígena Karipuna y concluye el proceso de desalojo de intrusos

El Gobierno federal acaba de computar los datos obtenidos tras el desalojo de intrusos del Territorio Indígena Karipuna, un área de 153 mil hectáreas en el estado de Rondônia, entre los municipios de Porto Velho y Nova Mamoré. En el análisis, se destaca la disminución de la desforestación como consecuencia de las medidas adoptadas por el Gobierno federal en el proceso de desalojo de intrusos, que se produjo entre junio y julio de este año.

La plataforma del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, Rede Brasil Mais, constató que hubo un cese completo de la desforestación dentro del territorio indígena en junio y julio de este año. En el mismo periodo de 2023, se registraron 20 alertas. La reducción se vuelve más significativa si comparamos este periodo con junio y julio de 2022, cuando se registraron 160 alertas de desforestación.

“Las principales amenazas para el Territorio Karipuna y su pueblo eran justamente la desforestación y las invasiones de los productores madereros. Trabajamos de manera firme, con 210 funcionarios del Gobierno federal, para devolver el usufructo del territorio al pueblo originario a quien pertenece”, afirmó Nilton Tubino, representante de la Casa Civil que coordinó las operaciones.

El proceso de desalojo de intrusos se realizó dentro del plazo establecido, durante dos meses, junio y julio, con la participación de 20 órganos federales. Según el informe final de la Casa Civil, que oficializa el trabajo y los resultados, las acciones han tenido éxito, con “la evacuación de los invasores, la inutilización de maquinarias y equipos, el monitoreo y la conservación de las áreas invadidas”. Entre los resultados, se destacan la incautación de 27 metros cúbicos de madera y la inutilización de otros 27 m³; la destrucción de una balsa, de 38 accesos y de 17 puentes.

También se logró la inutilización de 28 edificaciones dentro del TIKA, locales que servían de soporte para almacenar materiales que se utilizarían para la desforestación, como el combustible para las motosierras. Los cuatro accesos terrestres clandestinos identificados se inutilizaron. Se cumplieron todas las acciones planificadas, 152 en total, y con ello, los 42 indígenas que resistieron a la aniquilación de sus parientes recuperaron su tierra por completo y con mayor seguridad. El Gobierno federal, a través de la Fuerza Nacional y de la Fundación Nacional de los Pueblos Indígenas (FUNAI), seguirá presente en el área, con patrullas y monitoreo para evitar que se produzcan nuevas invasiones.

La homologación del TI Karipuna se produjo en 1998, desde entonces los indígenas están oficialmente autorizados, y solamente ellos, a usufructuar de forma plena y exclusiva los recursos naturales, según lo prevé la Constitución. El proceso de desalojo de los intrusos cumple también con una resolución judicial del Supremo Tribunal Federal (STF) en cumplimiento de la ADPF n.º 709 y la acción del Ministerio Público Federal (MPF) a instancias del Gobierno Federal, la FUNAI y el Estado de Rondônia.