Discurso del presidente Lula en la clausura del Foro Económico Brasil-Vietnam
Me gustaría, ministro Chính [Pham Minh Chính, primer ministro de Vietnam], decirle al pueblo vietnamita que este es el viaje más productivo e importante que Brasil ha hecho a Vietnam. He traído conmigo a diez ministros. Algunos empresarios brasileños están aquí y estamos firmando acuerdos muy importantes, con el objetivo de que nuestras comisiones negociadoras trabajen duro, porque Brasil y Vietnam son dos países muy grandes.
Vietnam tiene 101 millones de habitantes y Brasil, 213 millones de habitantes, por lo que son dos economías en fase de crecimiento y no podemos conformarnos con un flujo en la balanza comercial de apenas USD 7,7 mil millones. Tenemos potencial para llegar a los USD 15 mil millones, tenemos potencial para llegar a los USD 20 mil millones.
Es sumamente importante que profundicemos en los debates comerciales para que podamos encontrar similitudes entre nuestros países y podamos establecer una política comercial de intercambios más sólida.
No se trata solo de la cuestión comercial. Es importante que estrechemos lazos entre nuestros expertos e investigadores. Es necesario que nuestras universidades hablen más entre sí. Es necesario que estrechemos nuestra relación cultural, porque Vietnam tiene una cultura muy rica y Brasil también tiene una cultura muy rica. Es necesario que estrechemos nuestras relaciones en el ámbito del deporte.
Es importante que Vietnam tenga a Brasil como socio de confianza. Le dije al primer ministro Chính que no soy solo el presidente de Brasil, sino también un amigo de Vietnam y un amigo del Gobierno vietnamita y un admirador acérrimo del pueblo vietnamita.
Por eso, me alegro de esta reunión y espero que, a partir de ahora, Brasil y Vietnam no dejen de conversar, no dejen de dialogar y no dejen de hacer lo que tenemos que hacer: mejorar la calidad de vida de las personas a las que representamos.
Estoy muy agradecido por la reunión con el primer ministro Chính, estoy muy agradecido por la reunión con el presidente de la República, así como con el secretario general de la Asamblea Nacional y también con nuestro presidente de la Cámara de Diputados y el secretario general del partido.
Además, estoy muy agradecido por la maravillosa cena que el presidente nos ofreció anoche, más que una cena, una muestra de la cultura vietnamita, con baile, con música, de una manera extraordinaria y con gente muy simpática y muy bonita.
Estimados amigos y estimadas amigas:
Fui el primer jefe de Estado brasileño que visitó Vietnam.
Diecisiete años después de mi visita, vuelvo a un país radicalmente diferente.
Vietnam ha crecido a un ritmo medio del 6 % anual en las dos últimas décadas.
Los avances en infraestructuras y en su parque tecnológico han ido acompañados de un aumento de los ingresos y de mejoras significativas en los indicadores sociales.
Las naciones geográficamente distantes pueden encontrar sinergias y oportunidades para crecer juntas.
Con tan solo 35 años de relaciones diplomáticas, Vietnam y Brasil son un ejemplo de esta máxima.
Cuando el proteccionismo amenaza con desestabilizar las cadenas globales de valor, somos aliados en la lucha por un comercio internacional más justo basado en reglas acordadas a nivel multilateral.
La decisión de reconocer a Vietnam como economía de mercado, que tuve el honor de anunciar ayer, es una consecuencia natural de la madurez de nuestra relación económica.
Cuando estuve aquí por primera vez, nuestro intercambio comercial era modesto, apenas superaba los USD 500 millones.
En aquel momento, establecimos la ambiciosa meta de triplicar el comercio bilateral en tres años.
Alcanzamos ese objetivo y seguimos ampliando nuestros intercambios comerciales.
En 2024, el flujo comercial bilateral ascendía a USD 7,7 mil millones, es decir, doce veces más que en 2008.
En la actualidad, Brasil exporta más a Vietnam que a socios tradicionales como Portugal, el Reino Unido o Francia.
Vietnam es el quinto destino de los productos del sector agronegocio brasileño.
Suministramos alrededor del 70 % de la soja que importa Vietnam y el 37 % de su carne de cerdo.
En el plan de acción que firmamos ayer, nos comprometimos a alcanzar un intercambio de USD 15 mil millones para 2030.
La apertura del mercado vietnamita a la carne de vacuno brasileña, anunciada ayer por el primer ministro Pham Minh Chính, es el primer paso en esta dirección.
Esto permitirá la instalación de plantas de procesamiento en el país, lo que reforzará el papel de Vietnam como puerta de entrada de Brasil a la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
Los países del Sudeste Asiático representan casi el 6,5 % del PIB mundial en paridad de poder adquisitivo.
La negociación de un acuerdo MERCOSUR-Vietnam, que Brasil pretende lanzar cuando asuma la presidencia del bloque, también contribuirá a este objetivo.
Brasil será la puerta de entrada de Vietnam a América Latina.
Nuestro principal desafío es diversificar el comercio, incluyendo productos de mayor valor añadido.
En 2023, el primer ministro Pham Minh Chính visitó la sede de la Empresa Brasileña de Aeronáutica (EMBRAER) en São José dos Campos, donde pudo comprobar el alto nivel tecnológico y la capacidad de innovación del parque industrial nacional.
La empresa está dispuesta a suministrar a Vietnam Airlines las aeronaves ideales para ampliar la conectividad en el Sudeste Asiático.
La oferta incluye la instalación de un centro de formación y mantenimiento en Vietnam, así como el financiamiento del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social de Brasil.
La firma del Memorando de Entendimiento sobre Cooperación en Defensa en 2023 allanó el camino para las asociaciones en el sector.
Las aeronaves multimisión C-390 Millennium de la EMBRAER pueden satisfacer perfectamente las necesidades de la Fuerza Aérea de Vietnam.
Brasil también tiene tecnologías de energías renovables que compartir.
La descarbonización no es una opción, sino una necesidad y una gran oportunidad.
Tenemos décadas de experiencia en biocombustibles, que son alternativas de bajo costo para los sectores automotriz y aeronáutico, e incluso para la generación de energía eléctrica.
Hay potencial de cooperación en energía eólica y solar, así como en hidrógeno verde.
El sector privado tiene un importante papel que desempeñar en la reducción de emisiones y en el financiamiento climático.
Durante la presidencia brasileña del G20, propusimos el Fondo Bosques Tropicales para Siempre, que pretendemos lanzar en la COP30, en Belém.
Su objetivo es generar un flujo de apoyo financiero permanente para los países tropicales, como Brasil y Vietnam, que conservan sus bosques en beneficio de toda la humanidad.
Brasil pide a todos los países que presenten ambiciosas Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC) en línea con la meta de limitar el calentamiento global a un grado y medio centígrado.
Vietnam y Brasil ya están notando los efectos económicos del cambio climático.
Somos los mayores productores y exportadores de café del mundo y podemos lograr una mayor resiliencia climática en el cultivo del café mediante la cooperación técnica y científica entre ambos países.
Importantes empresas brasileñas están produciendo en Vietnam en los sectores del cuero, los productos farmacéuticos y los servicios de arquitectura.
Pero el volumen de inversiones recíprocas aún no está a la altura de las proporciones de Brasil y de Vietnam.
Para cambiar esta realidad, queremos empezar a negociar un Acuerdo de Cooperación y Facilitación de las Inversiones.
Podemos promover iniciativas conjuntas, como fondos de inversión bilaterales, misiones empresariales estratégicas y proyectos de colaboración en investigación y desarrollo.
Brasil está creando un entorno favorable para que las empresas extranjeras encuentren un destino seguro para sus inversiones.
Mi Gobierno ha adoptado políticas de modernización reglamentaria y de incentivos a la innovación y a las asociaciones público-privadas, que garantizan la seguridad jurídica y la previsibilidad para los inversionistas extranjeros.
Los resultados ya son visibles. Contradiciendo a los pesimistas, el PIB de Brasil ha crecido más de un 3 % en los dos últimos años. Volveremos a dar una sorpresa positiva en 2025.
Tenemos la tasa de desempleo más baja de la historia.
Con el decisivo apoyo del Congreso Nacional, aprobamos una reforma tributaria que se llevaba esperando más de 40 años.
Señoras y señores:
Esta reunión constituye un marco para una nueva fase de cooperación.
La numerosa delegación de ministros, parlamentarios, sindicalistas y empresarios aquí presente refleja la importancia que concedemos a la asociación estratégica con Vietnam.
Como dijo el camarada Ho Chi Minh, las raíces de las naciones son las personas.
Promover el comercio y la inversión es la mejor manera de generar empleo, ingresos y dignidad para nuestras sociedades.
Alcanzar estos objetivos es el desafío que planteo a los participantes en este Foro.
¡Cuenten conmigo!
Muchas gracias.