En Pekín, la ministra Silva y el ministro Runquiu fortalecen la cooperación medioambiental y climática entre Brasil y China

La ministra Marina Silva (Medio Ambiente y Cambio Climático) y el ministro de Ecología y Medio Ambiente chino, Huang Runqiu, se reunieron el lunes 12 de mayo en Pekín en el marco de la visita de Estado del presidente Lula a China. Dialogaron sobre formas de avanzar en la cooperación en áreas estratégicas para ambos países, como la lucha contra el cambio climático, la conservación de la biodiversidad, la repoblación forestal, la promoción de servicios ecosistémicos y la creación de instrumentos económicos innovadores.

“En un momento turbulento y desafiante en la geopolítica global, Brasil y China necesitan fortalecer cada vez más el multilateralismo”, afirmó la ministra brasileña. En 2024, por primera vez, el planeta superó la marca de 1,5 ºC de calentamiento medio en relación con el período preindustrial. “Ante este panorama alarmante, es necesario que ambos países impulsen la acción climática a nivel nacional y global. Hay muchas oportunidades para hacerlo”, defendió Silva.

“China es el mayor productor y proveedor de tecnologías para la transición energética a nivel mundial, y Brasil, que ya cuenta con una matriz energética limpia en un 49 %, trabaja para convertirse en uno de los mayores exportadores de sostenibilidad mediante la reducción de las emisiones de CO² y la pérdida de biodiversidad de los productos que comercializa a través de buenas prácticas”, añadió.

Durante la reunión, la ministra puso de relieve que la COP30, la Conferencia del Clima de la ONU, que se celebrará en la ciudad de Belém, Pará, en noviembre, debe ser la COP de la implementación, especialmente de los acuerdos establecidos en el Consenso de los Emiratos Árabes Unidos, definido en la COP28: triplicar el uso de energías renovables y duplicar su eficiencia, acabar con la deforestación para 2030 y promover una transición justa y planificada hacia el fin del uso de los combustibles fósiles.

Uno de los caminos decisivos para ello, destacó Silva, es la presentación de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) y los medios de implementación alineados con el objetivo de limitar el calentamiento de la Tierra a 1,5 ºC. Las NDC son las metas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de los países firmantes del Acuerdo de París. Hasta septiembre, todos los países deben presentar a la ONU sus compromisos para 2035.

Brasil realizó el proceso de presentación en noviembre de 2024, durante la COP29 celebrada en Azerbaiyán. La NDC brasileña prevé una reducción entre el 59 % y el 67 % de las emisiones netas para 2035, en comparación con los niveles de 2005, y abarca todos los sectores de la economía y los gases de efecto invernadero. El 23 de abril, durante la Cumbre Virtual sobre Ambición Climática, celebrada de forma remota por el presidente Lula y el secretario general de la ONU, António Guterres, el presidente Xi Jinping anunció que China presentaría una NDC ambiciosa.

BOSQUES TROPICALES — La ministra también instó a China a comprometerse con la viabilidad del Fondo Bosques Tropicales para Siempre (TFFF, por sus siglas en inglés). Desarrollado por los ministerios brasileños de Medio Ambiente y Cambio Climático (MMA), de Relaciones Exteriores (MRE) y de Hacienda, el mecanismo busca obtener USD 125 mil millones de fuentes públicas y privadas, de los cuales cerca de USD 25 mil millones provendrían de inversiones soberanas. Los ingresos del fondo se destinarán a remunerar a los países que poseen bosques tropicales, en función del número de hectáreas conservadas, según datos confiables obtenidos por satélite. El Gobierno brasileño trabaja para que el TFFF esté operativo antes de la COP30.

La creación del fondo se está debatiendo en una reunión de 12 países, divididos en dos grupos: seis países con bosques tropicales y seis países inversionistas. Este mecanismo constituye uno de los temas prioritarios de la presidencia brasileña de la COP30. El Gobierno chino ha manifestado su interés en contribuir y ha designado un punto focal para dirigir las negociaciones sobre esta cuestión.

También se debatió la relevancia del intercambio entre el MMA y la Administración Nacional de Bosques y Pastizales de China (NFGA, por sus siglas en inglés) en materia de reforestación y repoblación forestal. Esta asociación ayudará a Brasil a cumplir el compromiso que asumió en el marco de su NDC de restaurar 12 millones de hectáreas de tierras degradadas para 2030, según lo establecido en el Plan Nacional de Recuperación de la Vegetación Nativa (PLANAVEG).

La reunión en Pekín fue la segunda que mantuvieron Silva y Runqiu este año. La primera tuvo lugar en abril, en Brasilia, Distrito Federal, en el contexto de la 11.ª Reunión de ministros de Medio Ambiente del BRICS. En esa ocasión también se llevó a cabo la 5.ª Reunión de la Subcomisión de Medio Ambiente y Cambio Climático de la Comisión Sino-Brasileña de Alto Nivel de Concertación y Cooperación (COSBAN). Creada en 2023 por los presidentes Lula y Xi Jinping, la subcomisión aprobó en abril su Plan de Trabajo para el período 2025-2029. Marina Silva subrayó la importancia de implementar dicho plan. A la reunión también asistió el director general del Servicio Forestal Brasileño (SFB), Garo Batmanian.

El lunes, un poco antes, la ministra Silva y Batmanian se reunieron con Liu Guohong, presidente de la NFGA, y participaron en el seminario “El Camino hacia la COP30: Cooperación Brasil-China para la Restauración de la Vegetación y los Sumideros de Carbono Forestal”. El evento reunió a representantes de los Gobiernos de Brasil y China, así como a expertos de ambos países, con el fin de reforzar la cooperación bilateral entre Brasil y China en materia de reforestación y repoblación forestal.

VISITA DE ESTADO — La visita de Estado del presidente Lula a China, que tiene lugar del lunes al miércoles, 14 de mayo, representa una oportunidad para avanzar en los compromisos asumidos entre ambos países, incluida la Declaración Conjunta sobre la Construcción de la Comunidad Brasil-China para un Futuro Compartido, un Mundo más Justo y un Planeta más Sostenible, así como en programas prioritarios del Gobierno brasileño como el Novo Brasil (Nuevo Brasil) — Plan de Transformación Ecológica, el PLANAVEG y la Nueva Industria Brasil (Nova Indústria Brasil).

Con experiencias complementarias, Brasil y China tienen un gran potencial para desarrollar soluciones conjuntas de adaptación a los efectos del cambio climático y de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (mitigación), protección de la biodiversidad, lucha contra la desertificación y promoción de alternativas y sustitutos al plástico convencional. China acumula una vasta experiencia en reforestación con programas emblemáticos como la “Gran Muralla Verde” y el “Grano por Verde”, y destaca por el uso de tecnologías, políticas públicas y mecanismos de pago por servicios ambientales. Durante la visita, se celebrará el IV Foro China - Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), con la presencia de Lula y Xi Jinping.